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Un Nuevo Modelo Para La Salud y La Enfermedad- page 104

lo debaten o ignoran. La medicina psicosomática trata exclusivamente esas condiciones. Todas esas condiciones penetran a nuestro sistema a través de un proceso de sentir o pensar, mientras las consecuencias pueden sentirse en todos los niveles: mental, emocional o físico, dependiendo de la predisposición de cada uno.
Esta clase de estrés no es físico en manera alguna, sino dinámica y semejante a la energía. Un proceso similar dinámico y semejante a la energía ocurre cuando el cuerpo físico se enferma por agentes causales que parecen ser completamente materiales (microbios, bacterias, virus, etc.).

20. Una enfermedad sólo se manifestará si las frecuencias vibratorias del estímulo y del organismo coinciden.

Se crea al instante un nuevo estado de energía, y esto eventualmente cambia el ambiente interior fisicoquímico de tal manera que los virus, bacterias, etc., específicos puedan prosperar y multiplicarse.
Esta idea es un tanto avanzada, pero volveremos a ella mas adelante en el libro y la desarrollaremos. Mientras tanto uno se tiene que hacer la pregunta: ¿Cómo es posible que sea aceptable la idea de que una impresión emocional o mental cause enfermedades, en tanto que es inaceptable la idea de que una alteración pueda ser energética y no sólo material?
Otra pregunta que nos podemos hacer es: ¿Es posible que después de que un agente causal se encuentre con un organismo, se puedan desarrollar condiciones dentro del sistema que puedan permitir la mutación de microorganismos inocuos en otros que pueden causar patología?
He aquí la opinión de Marc Lappé: “Al hacer de nuestros propios cuerpos los campos de batalla para el control químico de bacterias, rompemos el balance ecológico natural de los microorganismos que mantienen la homeostasis de nuestras superficies internas y externas… El abuso de antibióticos como la penicilina pueden haber participado creando un terreno fértil para epidemias de bacterias resistentes a los antibióticos, y quizá aún hasta el SIDA”.
Estos organismos resistentes a los antibióticos no son cosa de juego. Muchos de ellos traen consigo las mismas propiedades causantes de enfermedades que los gérmenes que reemplazan. Mas aún, poseen un riesgo a largo plazo que aún no ha sido calculado, uno que amenaza a la generación actual de estadounidenses “a